miércoles, 27 de marzo de 2024

Muertes súbitas, ¿un efecto de la vacuna Covid-19

Muertes súbitas, ¿un efecto de la vacuna Covid-19?


En medio del debate en torno a las vacunas COVID-19, es crucial analizar detenidamente los rumores y las preocupaciones que rodean a estas inoculaciones. Los últimos informes apuntan a una serie de problemas graves, incluidos casos de problemas cardíacos y muertes súbitas, que se han relacionado con la vacunación contra el COVID-19, especialmente entre adultos jóvenes. Estos informes han avivado la desconfianza en las vacunas y han llevado a muchas personas a cuestionar su seguridad y eficacia.

Aunque se ha intentado desestimar estas preocupaciones como simples rumores infundados, la realidad es que existen datos alarmantes que respaldan estas afirmaciones. Por ejemplo, los informes de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) muestran un aumento significativo en el número de muertes entre las personas vacunadas en comparación con las no vacunadas. Esto plantea serias dudas sobre la supuesta eficacia de las vacunas y sus efectos en la salud pública.

Las muertes entre adultos jóvenes también han sido motivo de preocupación, especialmente después de la aparición de la variante Delta del virus. Sin embargo, análisis más profundos revelan que el aumento en el número de fallecimientos se correlaciona estrechamente con el inicio de la vacunación masiva, lo que sugiere una posible conexión entre las vacunas y estos trágicos eventos.

Los informes de problemas cardíacos entre los atletas jóvenes son especialmente alarmantes, ya que apuntan a posibles efectos secundarios graves de las vacunas COVID-19. Además, se han documentado casos de coágulos de sangre y otras complicaciones graves que se atribuyen a estas inoculaciones, lo que plantea serias dudas sobre su seguridad a largo plazo.

En vista de estas preocupaciones legítimas, es fundamental que se lleve a cabo una evaluación exhaustiva de la seguridad y la eficacia de las vacunas COVID-19. Mientras tanto, es importante que los individuos tomen decisiones informadas sobre su salud y consideren todas las opciones disponibles antes de optar por la vacunación. En última instancia, la salud y el bienestar de la población deben ser la máxima prioridad, y eso incluye abordar cualquier riesgo potencial asociado con estas vacunas.







Estelas químicas, ¿mito o realidad?

Estelas químicas, ¿mito o realidad?

¿Sientes mareos? ¿Sientes que no puedes respirar bien? ¿Te duelen tus ojos? ¿Te levantas con dolor de cabeza? ¿Has sentido náuseas? ¿ Dolor estomacal? 
¡Cuidado! ¡Podría ser provocado por estelas químicas, las cuales  están siendo esparcidas por los gobiernos para modificar el clima artificialmente!


En un mundo saturado de información, donde la línea entre la verdad y la conspiración a menudo se desdibuja, las estelas químicas han emergido como un tema polémico que despierta fuertes opiniones y debates apasionados. Aunque muchos descartan esta idea como una teoría conspirativa sin fundamento, un examen más detenido revela que hay pruebas significativas que respaldan la existencia de estas estelas y plantean preguntas preocupantes sobre su impacto en el medio ambiente y la salud humana.

Las estelas químicas, también conocidas como chemtrails, son estelas visibles que persisten en el cielo después del paso de aviones. A diferencia de las estelas de condensación normales, que consisten principalmente en vapor de agua congelado, las estelas químicas se caracterizan por su apariencia más densa y duradera, y se ha argumentado que contienen una variedad de productos químicos deliberadamente rociados en la atmósfera.

Numerosos testimonios y evidencias fotográficas respaldan la existencia de estas estelas químicas en todo el mundo. Los observadores han documentado patrones de vuelo inusuales y la presencia de aviones no identificados que rocían sustancias desconocidas en el aire. Además, análisis de muestras de suelo y agua han revelado la presencia de compuestos químicos como el aluminio, bario y estroncio, que coinciden con los que se encuentran en las estelas químicas.

Las implicaciones de estas estelas químicas son profundas y preocupantes. Se ha sugerido que estos productos químicos podrían estar destinados a una variedad de propósitos, desde la geoingeniería hasta la modificación del clima y la manipulación de la salud humana. Las comunidades cercanas a áreas de pulverización reportan un aumento en problemas de salud como enfermedades respiratorias, alergias y problemas de la piel, lo que alimenta aún más las preocupaciones sobre los posibles efectos adversos para la salud.

El debate sobre las estelas químicas nos obliga a cuestionar la transparencia y la responsabilidad de los gobiernos y las corporaciones en el uso de tecnologías que pueden tener consecuencias significativas pero desconocidas para el medio ambiente y la salud humana. Si bien es importante abordar estas preocupaciones con un enfoque basado en la evidencia y la investigación científica rigurosa, también es crucial mantener un diálogo abierto y honesto sobre este tema para garantizar la seguridad y el bienestar de las generaciones futuras.



Notas
[1] Appleman, H. (1953), The formation of exhaust condensation trails by jet aircraft. Bull. Amer. Meteor. Soc., 34: 14-20.

[2] Heymsfield, A.; et al (2010) Contrail microhysics. American Meteorological Society, Abril 2010: 465-472.

[3] House, T.J. et al. (1996), Weather as A Force Multiplier. Owning The Weather in 2025. A Research Paper, United States Air Forces, 44 pp.

[4] Vermeeren, P. (2010), Case Orange. Contrail Science, its impact on Climate and Weather Manipulation Programs Conducted by the United States and its Allies. Belfort Group, Hoiwege, Evergem Belgium, 300 pp.

[5] EPA (2000), Aircraft Contrails Factsheet. United States Environmental Protection Agency.

domingo, 16 de abril de 2023

Factores más incidentes actualmente en el proceso de construcción del sujeto

La subjetivización es el proceso de construcción del yo, es decir, la forma de ser y de entender el mundo desde la perspectiva personal y única del sujeto. En ese sentido, los factores más incidentes  actualmente en este proceso son los discursos y las relaciones interpersonales. Los discursos porque son un marco de referencia que permite al individuo crear la realidad,  entenderse, comprenderse, comprender el mundo que lo rodea y plantearse dilemas existenciales. Por ejemplo, ciertos tipos de música, series de televisión o medios de comunicación pueden influir en la forma en que el sujeto se construye de acuerdo a si es hombre, mujer… como sucede actualmente con los discursos de género. Otro factor que incide en el proceso de construcción del sujeto son las relaciones personales, puesto que son una fuente de interacción social y emocional en las que se aprenden nuevas formas de pensar, de sentir, de comportarse; se comparten ciertas normas, valores  y actitudes que se circunscriben al entorno social y cultural en el que el sujeto se desenvuelve. Como se ha dicho… uno es la música que escucha, las series de televisión que ve y el promedio de las cinco personas con las que se junta.

 

En otro orden de ideas, las características psicosociales y culturales que definen al sujeto que se construye hoy son: la individualidad, el consumismo, el amor al dinero, el relativismo moral y la superficialidad… En cuanto a la individualidad, muchos la consideran el horizonte de realización de la persona humana, sin embargo, esta promueve la ejecución de las necesidades y deseos personales por encima de las necesidades de la sociedad en su conjunto. En consecuencia, tendríamos falta de solidaridad, indiferencia, desigualdad social, egoísmo y muchos otros antivalores que se hacen presentes en la sociedad actual. Con respecto al amor al dinero, vemos que muchas personas hacen lo que sea por conseguirlo, sin importar si es bueno o malo;  de hecho la lógica de la compra y la venta ya no se aplica solamente a los bienes materiales, sino a todas las facetas de la vida (personal, profesional y social). Con referencia al relativismo moral y a la superficialidad se vislumbra una visión un tanto simplista que se decanta por soluciones prodigiosas para problemas complejos; lo importante es la apariencia, el estilo de vida, lo que conlleva a la destrucción de los pilares que rigen nuestra civilización: los valores y la importancia del ser. 


Finalmente, la escuela debe desempeñar un rol reflexivo, crítico y analítico frente a los procesos de subjetivización que vive el sujeto de hoy, puesto que debe garantizar que dicho sujeto esté equipado con las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos que les esperan en el mundo real. Por ello, no puede limitarse a proporcionar conocimientos teóricos y técnicos, sino que debe prepararlo para tomar decisiones informadas, concienzudas y dentro del marco de los valores morales y éticos en un mundo cada vez más complejo y cambiante.

 


Informe de lectura del artículo “Orígenes e inicios de los estudios culturales” de Eguzki Urteaga


La cultura es la representación compartida e interiorizada de esquemas, formas simbólicas, modos de vivir, de relacionarse con otros, de ideas, tradiciones, creencias y valores que poseen determinados grupos sociales. Los estudios acerca de esta, emergen a raíz de investigaciones de varias figuras destacadas del humanismo romántico en el siglo XIX. Es justamente este tema el que se aborda en el artículo intitulado “Orígenes e inicios de los estudios culturales” del profesor e investigador de la Universidad del país Vasco, Eguzki Urteaga y del cual se  analizará los puntos clave y se expondrá los conocimientos construidos.

En primer lugar, los estudios culturales se ocupan del estudio de las prácticas discursivas/culturales en la construcción de contextos, configuraciones, estructuras de poder y cómo estas son constituidas y organizadas a partir de la literatura. De acuerdo con Urteaga, sus antecedentes se remontan al siglo XIX en Inglaterra a partir de una corriente[1] iniciada  por Raymond Williams. Luego, Mathew Arnold propone la filosofía de la educación como forma de analizar la cultura de las clases ascendentes y difundir el legado de sus antecesores a partir de  estaba social, cultural y políticamente Inglaterra, su producción industrial, y evitar la americanización de la cultura popular.

En segundo lugar, los principales fundadores de los estudios culturales son cuatro: Richard Hoggart, en su obra [2] expone la infravaloración de las clases populares vs. la industria cultural, Raymond Williams[3]; Edward P. Thompson [4] con ambos vinculados a la  nueva izquierda, filosofía marxista y Stuart Hall, principal fundador de la revista New Left Review. Estos fundaron el “CCCS”[5] en la Universidad de Birmingham, el cual marcó el inicio de los estudios culturales.  Las principales escuelas y corrientes en las que estos estudios se inscriben son la de Frankfurt[6],  en la cual se analiza de forma racional vs. la realidad y la irracionalidad de la sociedad industrial avanzada, la de Chicago o norteamericana[7],la cual analiza las tendencias actuales vs. las reacciones de la audiencia/cultura de masas  y la de Birhminghan en la que se pone de manifiesto la continua dialéctica entre el sistema cultural, conflicto y poder social.

Por otro lado, las corrientes en las que se sustenta los estudios culturales son: la británica, la cual hace referencia a cómo comprender la cultura en toda su complejidad y analizarla  desde el contexto político, social y las estructuras de poder; la culturalista,  cuya principal característica es la utilización de textos abundantes que se consideran prototipos de la cultura que se quiere transmitir y la estructuralista la cual considera a cualquier realidad humana como una totalidad estructurada y significativa que debe estudiarse de forma sincrónica y no diacrónica.

En resumidas cuentas, la importancia de los estudios culturales radica en que nos permite comprender la cultura en toda su complejidad, es decir, en los procesos sociales y  políticos que es donde esta se manifiesta. Además, rompe con la separación existente entre lo culto y lo popular (la alta cultura y la baja cultura). Esto implica valorarla en su especificidad como forma y proceso de creación de significados. En ese orden, la relación con la lengua y la literatura se hace evidente a partir del texto (ámbito exclusivo de la literatura) y con él a estudiar los medios de difusión masiva e interacción cultural de las masas, teniendo en cuenta que es un mensaje simbólico de manera que no se infravalore a ciertos grupos.



[1] Culture and Society”

[2] The Uses of Literacy: Aspects of Working-Class Life with Special References to Publications and Entertainments(1957)

[3] Su publicación: Culture and Society (1958)

[4]  Su obra: The Making of the English Working Class (1963)

[5] Por sus siglas en inglés, Center for Contemporary Cultural Studies, fundado en 1964

[6] Siglo  XX

[7] Vinculada al pragmatismo de Dewey y el interaccionismo de Mead y Blumer´





Bibliografía

 

Urteaga, E. (2009). Orígenes e inicios de los estudios culturales. Gazeta de Antropología, 25 (1) Artículo 23. 

LOS PUEBLOS PRE-ROMANOS

 

Desde tiempos remotos, los pueblos han sido estudiados para conocer su ubicación geográfica, peculiaridades culturales, religiosas, organización social, lengua y características étnicas importantes. Por ello, en el día de hoy podemos estudiar y conocer cuatro de los pueblos que se asentaron en la península Ibérica, mejor conocidos como pre-romanos. En ese sentido, el presente resumen pretende exponer los aspectos más importantes del pueblo celta, celtíbero, íbero y tartesso en términos de su ubicación, organización social y escrituras; a partir del panel realizado por el grupo 1 en fecha 28/01/2023.

En primer lugar, los celtas se ubicaron en el centro, norte y oeste de la península Ibérica, cerca de los ríos Duero y Pisuerga. De acuerdo con varios estudiosos, su historia es un misterio, aunque algunos expresan que provienen de la India. Se cree que una de sus culturas más impresionantes fue la Haltatt la Tene, la cual tuvo su máximo esplendor en los años 700 a.C. Se consideraban buenos herreros, pues sustituyeron el bronce para realizar sus armas para ciertas batallas. Con respecto a su organización, los celtas tenían una jerarquía (castas) que eran dirigidas por un rey, nobles, plebeyos libres y esclavos. De igual manera, tenían guerreros y sacerdotes.

Por otro lado, los celtas no tenían una escritura como tal debido a que era oral. De acuerdo a su idioma, se dice que se dividió, dando como resultado el  celta q o gordeliz hablado en toda Irlanda y Escocia. Este evolucionó al  gaélico, irlandés y el escocés.

En segundo lugar, los celtíberos se ubicaron en el centro peninsular y en el valle del Ebro, entorno al sistema ibérico. Sus ciudades más reconocidas fueron Segóbrida, Bílbilis y Numancia. En ese mismo orden de ideas, los celtíberos estaban organizados en un consejo de ancianos (seniores) y un consejo de jóvenes (iuniores), es decir, forma organizativa indígena de carácter suprafamiliar. Poseían príncipes y jefes, guerreros y mercenarios, senados y asambleas populares.

Su escritura es una adaptación de la escritura ibérica nororiental. Presenta signos con valor silábico y signos con valor alfabético consonánticos y vocálicos. No posee alfabeto ni silabario sino una escritura mixta. Su lengua ha conservado la mayor parte de las estructuras gramaticales propias.

En tercer lugar, los íberos se ubicaron en el este y parte del sur peninsular, la costa mediterránea, el río Gualdaquivir y el valle del Ebro; lo que hoy es Andalucía y el sur de Francia. Estos estaban organizados de la forma siguiente: la aristocracia, los hombres libres (de riqueza media), la clase baja y los guerreros.

Su escritura clásica surge de la fusión de la escritura meridional y la greco-ibérica. Su alfabeto utiliza 28 signos: silábicos y consonánticos (sonoros y sordos). Este alfabeto es una adaptación artificial creada para ahorrar trabajo a los que lo escribían.  De igual manera, se puede decir que tomó signos de los alfabetos púnico y griego.

En cuarto lugar, los tartessos se ubicaron en el suroeste de la península ibérica, en lo que hoy es el triángulo: Huelva, Cádiz y Sevilla. Estos estaban organizados en un gobierno monárquico que controlaba todo el territorio y las castas: una clase mercantil, terratenientes, clases intermedias y esclavos.

Su escritura, denominada también sudlusitana, es muy similar tanto por la forma de los signos como por el valor que esos signos representan a la lengua ibérica. Sin embargo, esta lengua no ha podido ser relacionada con ninguna otra. Una característica importante de su escritura es la redundancia vocálica de los signos silábicos. Su idioma es el tartésico.

En resumidas cuentas, como hemos podido constatar, de una forma u otra estos pueblos se relacionaron en sus inicios. Su ubicación en la península Ibérica le permitió compartir territorio aunque luego, cada uno de ellos tomara el norte o el sur, el este o el osete. Sin embargo, al cada uno de ellos ubicarse en regiones distintas, su organización social y su escritura varió tal y como se dijo en los párrafos anteriores. Reconocer la importancia histórica y cultural de estos pueblos es de suma importancia para poder entender cómo posteriormente, con los encuentros futuros con otras civilizaciones, permitieron la génesis de lo que conocemos hoy como idioma español.

 

 

 

 

 

Referencias bibliográficas

ALMAGRO GORBEA, M. y RUIZ ZAPATERO, G. (1993): Los Celtas: Hispania y Europa, Madrid.

 

ALMAGRO GORBEA, M., ARTEAGA, O., BLECH, M., RUIZ MATA, D. y SCHUBART, H. (2001): Protohistoria de la península ibérica, Barcelona.

 

ANDERSON, J. M. (1991): Guía Arqueológica de España, Madrid.

 

BELÉN DEAMOS, M. y CHAPA BRUNET, T. (2000): La Edad del Hierro, Madrid.

 

BENDALA GALÁN, M. (1990) La Antigüedad. De la prehistoria a los visigodos, Madrid.

 

BENDALA GALÁN, M. (2000): Tartesios, íberos y celtas. Pueblos, culturas y colonizadores de la Hispania Antigua,

Investigación de variantes o dialectos del español El judeoespañol y el español chabacano

 

El español es uno de los idiomas más hablados del mundo, con una gran diversidad de variantes que lo hace único y dinámico. Normalmente, estas variaciones se dan de acuerdo a la situación comunicativa, los niveles socioculturales y las zonas geográficas  de  los usuarios de la lengua. De hecho, algunas de esas variantes son consideradas por muchos como lenguas distintas al español porque están compuestas por estructuras y aspectos gramaticales  propios como es el caso del judeoespañol que es un dialecto hablado por los judíos sefardíes y el español chabacano (variedad del español hablado en Filipinas, especialmente en la región de Zamboanga). El presente informe tiene como propósito explicar  estas dos lenguas/ variedades dialectales tomando como base los lugares en donde se hablan estos dialectos, su conformación, características y algunos ejemplos de textos en estos dialectos.

 

El judeoespañol surgió como un dialecto del español en los siglos XIV y XV en territorios colindantes con el Reino de Castilla y recibió influencias de otras lenguas como el hebreo, el árabe e incluso del portugués. Según varios autores, se extendió gracias a la expulsión de los árabes (sefardíes) de la Península lo que llevó a que estos se amplificaran por varias partes del mundo como el Mediterráneo, el Norte de África, la región de los Balcanes, Marruecos, Constantinopla (hoy Turquía), Israel, Grecia,  entre otros.  Es muy relevante considerar que el nombre “sefardíes” hace alusión a la palabra hebrea con que se designada a España, “Sefarad” (Niewęgłowska, 2010).

 

El judeoespañol se conformó, como hemos dicho anteriormente,  a partir del español y el judío, de hecho, algunos lo llamaban “ espanyol” o “espanyoliko” “ kastiyano viejo”, etc. Se cree que su conformación se debe además, a las personas que hacían negocios en el Mediterráneo  para poder comunicarse con los habitantes de la península (aquellos que hablaban español/ judío/hebreo). Algunos aluden al término “ladino” o “djudezmo” al judeospañol para englobar todas las variedades de este dialecto.

 

En cuanto a las características,  el judeoespañol es notable su acento tonal por las elevaciones de voz que se dan en su pronunciación. Existen también varios sonidos vocálicos como la “a” cerrada o la “a” abierta de acuerdo a lo que se quiera expresar. La “a” en posición final de sílaba normalmente se pronuncia como “e” como sucede por ejemplo en la palabra “sabía” del español, en judeoespañol sería “sabíe”. La acentuación se encuentra normalmente en la última sílaba y es muy frecuente la diptongación como ocurre en palabras como “cuerpo”= “cuerpó ”. Otra de las características de este dialecto es que pronuncia el sonido /c/ como /k/. La /d/ final se pronuncia con mayor fuerza que en el español en palabras como “verdad”.

 

Con relación a los aspectos gramaticales que caracterizan este dialecto se encuentran: las flexiones verbales, el uso del pretérito perfecto y el pretérito indefinido, conservación de formas verbales vernáculas del español primitivo, ausencia del género neutro, el voseo,… Las flexiones verbales son distintas al español como ocurre en las conjugaciones de verbos como “yo soy” del español a “yo so” del judeoespañol. En otro orden,  en cuanto al pretérito indefinido,  este se utiliza para referirse a acciones que ocurrieron en un momento específico del pasado, mientras que el pretérito perfecto se utiliza para acciones que tienen una relación con el presente. En cambio, en el español moderno, el pretérito perfecto se usa para acciones completadas en el pasado, independientemente de si tienen o no una relación con el presente. El género neutro “lo” del español no existe en este dialecto, por lo que debe clasificarse como masculino o femenino. Además, el voseo, consiste en utilizar el pronombre "vos" en lugar de "tú" para la segunda persona singular. Por ejemplo, en lugar de decir "tú hablas" se dice "vos ablás".

 

Con referencia a la sintaxis, este dialecto posee la misma estructura del español, con el sujeto, el verbo y el objeto. Sin embargo, el judeoespañol puede colocar el objeto antes del sujeto para dar énfasis. Asimismo, posee muchas palabras de origen español como préstamos lingüísticos de otras lenguas como el hebrero, el turco, el griego y el francés. Observemos el ejemplo siguiente del judeoespañol: “El djudeo-espanyol, djidio, djudezmo o ladino es la lingua favlada por los sefardim, djudios arrondjados de la Espanya en el 1492. Es una lingua derivada del kastilyano i favlada por 150 000 personas en komunitas en Israel, la Turkiya, antika Yugoslavia, la Gresia, el Marroko, Espanya i las Amerikas, entre munchos otros”. En este caso, es muy claro el uso del sonido /i/ por /e/, /v/ por /b/, /c/, por /k/, etc. Este texto, “ladinado” (traducido) al español sería: “El judeo-español, djudio, djudezmo o ladino es la lengua hablada por los sefardíes, judíos expulsados de España en 1492. Es una lengua derivada del castellano y hablada por 150 000 personas en comunidades en Israel, Turquía, la antigua Yugoslavia, Grecia, Marruecos, España y América, entre muchos otros”.

 

En este proceso de investigación, se solicita también abordar el español chabacano. El cual es otro dialecto o variante del español surgido en Filipinas, que tuvo su génesis en la colonización española que se dio en ese país en 1571. El español chabacano es hablado en Cavite, Zamboanga, Mindanao… La conformación de este dialecto se produjo tras España imponer el idioma como lengua para comerciar, documentos oficiales y la iglesia. A medida que se iba dando este proceso, se mezcló el español con el tagalo y otras lenguas locales.

 

Las principales características de esta variante del español la podemos encontrar en la gramática, la cual es simplificada en comparación al español estándar. Por ejemplo, se utiliza la misma forma para el presente de indicativo tanto en la primera como en la tercera persona singular y plural (ejemplo: "yo come", "él come", "nosotros come", "ellos come"). Asimismo, en lugar de usar los pronombres personales antes del verbo, como en español estándar, el español chabacano los coloca después del verbo. Por ejemplo, en lugar de decir "yo te amo", se dice "amo ikaw" (literalmente, "amo tú"), entre otras.

 

Un ejemplo de texto de este dialecto es el siguiente: “Treinta y cuatro kilómetro desde el pueblo de Zamboanga, Bunguiao un
diutay barrio, estaba como un desierto. No hay gente quien ta quedá.
Abundante en particular de magá animal como puerco, gatorgalla, venao y
otro pa. Magá pajariador lang ta puede visitá con este lugar”
. En español significa: “A treinta y cuatro kilómetros de la ciudad de Zamboanga, Bunguiao, un barrio pequeño, era una vez un desierto. Ninguna gente vivió aquí. El lugar abundó con los animales salvajes como puercos, gatos monteses, venados, y aún otros. El lugar fue visitado solamente por los cazadores (de aves)”.

En conclusión, tanto el judeoespañol como el español chabacano son dialectos del español que se han formado a través de la influencia de otras lenguas. El judeoespañol ha sido influenciado por el hebreo y otras lenguas semíticas, mientras que el español chabacano ha sido influenciado por lenguas nativas filipinas y otros idiomas europeos y asiáticos. Ambos dialectos presentan características únicas en su pronunciación y gramática, que los distinguen del español estándar. A pesar de estas diferencias, el judeoespañol y el español chabacano siguen siendo parte del patrimonio lingüístico y cultural de sus respectivas comunidades, y su estudio y preservación son importantes para la comprensión de la diversidad lingüística y cultural del mundo.

 

 

 

 

Referencias bibliográficas

 

ATTÍAS, Moshé; CAPDEVILA, Arturo; RAMOS GIL, Carlos: Supervivencia del judeosespañol, IX Cuadernos Israelíes, Jerusalén,1964.

 

BARQUÍN, Amelia: La prensa sefardí: fuente de materiales literarios en Ínsula, nº 647, 2000, págs. 2528.

 

BEL BRAVO, María Antonia: Ángel Pulido y el sefarditismo internacional en Hispania Sacra, nº 45, 1993, págs. 739-762.

 

BENBASSA, Esther; RODRIGUE, Aaron: Historia de los judíos sefardíes. De Toledo a Salónica, Madrid, 2004.

Niewęgłowska, M. (2010). EL DIALECTO JUDEOESPAÑOL: UNA HISTORIA DEL EXILIO. chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/https://lateinamerika.phil-fak.uni-koeln.de/fileadmin/sites/aspla/bilder/ip_2010/m.nieweglowska_trabajo.pdf 

Ensayo expositivo sobre el tema «La romanización de Hispania»


A lo largo de los siglos de dominio romano sobre distintos pueblos y provincias,  las costumbres, la religión, las leyes y en general el modo de vida de Roma, se imponía o se acataba como forma se sentirse parte del imperio. En ese orden, la romanización de Hispania se refiere al proceso de transformación cultural y social que tuvo lugar en la península ibérica a lo largo de los siglos II a.C. y II d.C. bajo la influencia de la conquista y colonización romana. Durante este período, los romanos introdujeron su lengua, leyes, religión, arquitectura y tecnología en la península ibérica, y establecieron un sistema político y administrativo que transformó profundamente la sociedad y la cultura. El presente ensayo expositivo pretende explicar este proceso.

 

El proceso de romanización de Hispania inició en el año 218 a.C., cuando los romanos comenzaron su conquista de la península ibérica durante la Segunda Guerra Púnica. El general romano Publio C. Escipión desembarcó en Ampurias, en la costa noreste de la península, y derrotó a los cartagineses en la batalla de Cissa. A lo largo de los siglos II a.C. y I a.C., los romanos continuaron su avance hacia el interior de Hispania, estableciendo colonias y ciudades fortificadas en toda la península. Durante este período, la presencia romana se hizo cada vez más evidente, se fueron produciendo una serie de cambios en la sociedad y la cultura que fueron conformando el proceso de romanización.

 

Este proceso alcanzó su punto máximo durante los siglos I y II d.C., cuando Hispania se convirtió en una de las provincias más importantes del Imperio Romano. Sin embargo, «La pacificación no fue completa hasta que Augusto dominó cántabros y astures en el 19 a.C. (Lapesa, 1981, p. 53)». Durante este período, se construyeron numerosas ciudades, carreteras, puentes y edificios públicos en toda la península, y el latín se convirtió en la lengua dominante.

 

El latín como lengua dominante se caracteriza por ser una lengua altamente estructurada y refinada, con una gramática y un vocabulario complejo y preciso. Poseía sus diferencias con relación al griego, en cuanto a los aspectos fonéticos, gramáticos y alfabéticos pero redujo los diptongos e hizo más sencillo el uso de las consonantes propias del mundo indoeuropeo. Además, a través del contacto con la civilización griega, Roma enriquece su idioma al agregar musicalidad, finuras de matices,  que le permitió hacerse capaz de desarrollar la poesía, la filosofía y la elocuencia. Algunos autores romanos que aprovecharon la técnica y el modelo de  Grecia fueron Cicerón, Virgilio, Tito Livio, Quintiliano, Lucano y Marcial.

 

Como era de esperarse, tras conquistar la Hélade, los romanos tomaron conceptos de nombres generales y actividades propias del espíritu, tecnicismos literarios, vocablos referentes a danza y deporte, a la enseñanza y educación,… lo que les permitió refinar su lengua. En ese sentido, tenemos la preposición kata, sufijos verbales, adjetivos, adaptaciones fonéticas, perífrasis verbales (estoy diciendo) sufijos, terminología como tecnocracia, anafilaxia, etc. Por su parte, el latín culto se inició a partir de la escritura, el cual se enseñaba en las escuelas y el que todos pretendían aprender a escribir y el latín hablado por las gentes medias y las masas. La lengua literaria se depuraba hasta llegar a las Odas de Horacio o la prosa de César o Tácito; el habla vulgar seguía atada a usos antiguos pero desarrollaba tendencias existentes en el idioma.

 

Durante el imperio, el latín culto se estacionó, mientras que el vulgar proseguía el camino que debía llevar el nacimiento de las lenguas romances. Al fin de la época imperial, las invasiones y la consiguiente decadencia de la cultura aceleraron del declive de la lengua literaria. Esta era solo utilizada solo por eclesiástico y letrados. El latín clásico y vulgar diferían en el orden de las palabras, la ubicación de los determinantes, su estructura morfológica, evoluciones fonéticas, las desinencias, los genitivos, los comparativos y superlativos, multitud de alteraciones fonéticas (layod), etc. En cuanto al orden de las palabras, la construcción clásica admitía frecuentes transposiciones entre dos términos ligados por el sentido y la concordancia; la estructura morfológica estaba dada por las desinencias -um «así por ejemplo la palabra hominum significa hombre representada por el tema homin, las notas del genitivo y el plural» (Lapesa, 1981, p. 71).

 

Por otro lado, con referencia a los cambios fonéticos es preciso señalar los referentes al sistema acentual y al vocalismo. Tenía un ritmo cuantitativo-musical basado en la duración de las vocales y sílabas. Se utilizaban diez vocales y más tarde, se redujeron a siete. Así se pronunciaban largas las vocales que terminaban en sílabas y breves las que estaban en sílaba acabada en consonante. Asimismo, el problema de la diptongación, donde Narvea pasó a ser Naervae, tribunicie por tribuniciae; la vocal postónica y la separación silábica.

 

En otro orden de ideas, el vocabulario del latín vulgar no presentaba todos los términos del clásico, con lo cual se borraron diferencias de matiz, que la lengua culta expresaba con palabras diferentes como “jocus= burla reemplazó a lodus= juego”, “caballus= caballo”, “casa a domus”, “gladius sucumbió ante el griego spatha”; “usare=usar·; “altiare=alzar”. Como se puede notar, el latín vulgar fue muy aficionado a la derivación “mane=mañana”;  “carrus= carricare= cargar”. Es preciso mencionar que el latín hispánico tuvo aspectos arcaizantes, en el español cueva, catalán y portugués cova exigen un latín cova anterior a la forma clásica cava;  «en Nevio, Plauto, Ennio y Terencio, contemporáneos de las conquistas romanas en la Península, se encuentran fartus con el sentido de harto, perna con el valor de pierna, cansare por cansar, serrare por cerrar, querere por querer,…» (Lapesa, 1981, p. 89).

 

Otro aspecto que permitió los arcaísmos latinos fue el distanciamiento del Imperio. Por eso se relacionan el español y el resto de las lenguas romances meridionales,  orientales y de zonas aisladas. Sucede lo mismo con los aspectos gramaticales, sustitutos brevior o longior de magislongus y pluslongus. Los demostrativos hic, iste, ille indicaban en latín la gradación de distancia en relación con las tres personas gramaticales. Tanto en el español como en el portugués se conserva el pluscuamperfecto latino amaveram, potueram, convertido en subjuntivo amara, pudiera.

 

Por último, con respecto a las palabras populares, cultas y semicultas, es bien conocido que la Iglesia tiene un valor inconmensurable con relación a la lengua hablada y escrita que se pueden encontrar en la liturgia de esta. Por ejemplo, las palabras filius, genesta, saltus han derivado en hijo, hiniesta y soto. «Según las leyes fonéticas que distinguen el castellano de otras lenguas romances. Son las palabras llamadas populares o tradicionales que constituyen el acervo más importante de cada lengua» (Lapesa, 1981, p. 109).  Voces populares como argilla y ringere se deformaban hasta llegar a arcilla y reñir. No sucedió lo mismo con virgine y angelus  que declinó en virgen y ángel. Sin embargo, los cultismo puros se atienen con fidelidad a la forma latina pura como “evangelium= evangelio, voluntate= voluntad.

 

En conclusión, la lengua latina en Hispania tuvo una gran influencia en la cultura y las lenguas romances de la península ibérica. El latín hispánico presentó aspectos arcaizantes que han dejado su huella en las lenguas romances actuales, y la coexistencia del latín literario y vulgar es un factor clave en la evolución de las lenguas romances. La fonética y sintaxis del latín hispánico también presentaron características propias que lo diferenciaron del latín clásico.

 

 

 

Referencias bibliográficas

 

Lapesa Rafael. (1981). Historia de la lengua española. Editorial Gredos, S.A. https://filologiaunlp.files.wordpress.com/2012/04/rafael-lapesa-historia-de-la-lengua-espanola.pdf

 

 


domingo, 6 de noviembre de 2022

Análisis del capítulo 2 del libro o apartado “Lingüística y enseñanza de la lengua” de Marta Marín

 

Desde tiempos inmemorables crear un concepto sobre la comunicación como ta, ha sido objeto de discrepancias entre diversas disciplinas (ingeniería, antropología, lingüística y comunicología). A raíz de estas diferencias, se ha tomado el capítulo 2 del libro o apartado “Lingüística y enseñanza de la lengua” de Marta Marín, con el fin de realizar un análisis puntual acerca del tema antes mencionado. Las preguntas que guiarán este recorrido son las siguientes:   ¿Cómo era considerado el modelo de Jakobson por los antropólogos? ¿Qué quiere decir la autora con la expresión “la comunicación es más que lenguaje”? ¿Por qué se dice que hay una estrecha relación entre los comportamientos sociales y la comunicación? ¿Por qué está constituida la situación comunicativa? ¿Cuál es la diferencia que existe entre el modelo de Jakobson y el de Kerbrat-Orichioni? ¿Cuáles son las funciones del lenguaje según Jakobson y Halliday?

El concepto de comunicación y las diferencias encontradas por antropólogos que explicitaban “que los seres humanos transmiten modos de conductas”, trajo consigo deferencias, pues a raíz de estas se consideraron inaceptables los modelos de Jakobson por ser “esquemáticos y mecanicistas”. Esto se traduce, en que dichos modelos seguían el enfoque estructuralista. Así surgieron nuevas construcciones de la definición y se llegó a la conclusión de que la comunicación presenta más elementos de los que se puede cualquier estudioso del área imaginar; estos pueden ser internos o externos tanto al emisor y receptor.

En otro orden de ideas, la autora menciona que “la comunicación es más que lenguaje”, haciendo referencia a que la comunicación consta de otros atributos que pueden pertenecer a rasgos o aspectos heredados por la cultura; como por ejemplo la comunicación no verbal: gestos, movimientos, silencios, expresiones faciales, etc. De igual forma, existe una estrecha relación entre los comportamientos sociales y la comunicación dentro de lo cual, lo lingüístico es un subsistema; esto es así porque ella integra múltiples comportamientos como la palabra, entonación, los gestos, mímicas, mirada, espacio interindividual, etc. Por consiguiente, se puede afirmar que dichos comportamientos tienen reglas sociales de utilización del lenguaje: interlocutor, tema, lugar y relación con el interlocutor.

Por otra parte, según Jakobson la situación comunicativa está constituida por las personas; factores psíquicos que son regidos por la mente (sociales, lingüístico y cognoscitivo)  y los factores situacionales que lo determina el contexto de relación (el lugar, asunto y momento). Sin embargo, la lingüista francesa Kerbrat Orecchioni formuló un nuevo esquema de comunicación, que explica que las competencias lingüísticas y paralingüísticas incluyen la capacidad para armar enunciados e interpretarlos. Asimismo, se puede evaluar la entonación, los gestos y todos los aspectos no verbales a través del conocimiento del mundo o del universo ideológico de cada persona lo cual va a incidir en las determinaciones psicológicas, o lo que es lo mismo, en las ideas o imágenes que se crean los que se comunican.

Por otro lado, la redactora del capítulo explicita que existen otros factores que intervienen en la comunicación,  entre ellos están: el ruido, que es entendido en el esquema matemático como una interferencia indeseable y contra-argumentado por la antropología, que especifica que este es inherente a la comunicación, es decir, que es propio de ella y que él existe en cuanto es y ella existe. También está la redundancia, que es entendida como “expresiones que hay que evitar” (normativa tradicional), sin embargo, ahora utilizada para enfatizar y aclarar lo que se dice, la ambigüedad que se traduce a que al mensaje se le da más de una interpretación y “el código que es un sistema de señales, al igual que la lengua en cuanto al sistema abstracto se refiere” pero quedarían fuera los factores psíquicos, discursivos y sociales mencionados anteriormente, es por ello que en la actualidad es más conveniente utilizar “producción e interpretación” por resultar menos mecanicistas y más abarcadores y sobre todo flexibles.

 

En otro tenor, Jakobson aborda el subtema de “las funciones del lenguaje”  con el fin de explicar que cuando se habla no se hace porque sí, sino porque se quiere lograr un propósito en el enunciatario. Es así como estas funciones están relacionadas con un componente teórico de la comunicación. Por ejemplo, a informar le corresponde la función referencial (comunicación de datos, hechos), a influir  la función conativa (para que el receptor actúe o piense de cierta forma) a expresar subjetividad la función emotiva (deseo de la propia interioridad del emisor), a mantener la comunicación la función fática (aparece cuando el mayor interés de los participantes es mantener abierto el canal de comunicación)  a crear arte verbal la función poética ( orientada al mensaje por el mensaje mismo) y a hablar del lenguaje la función metalingüística (centrada en el código, el lenguaje es el único código reflexivo que se vuelve sobre sí mismo).

En contraste a lo postulado por Jakobson en el párrafo anterior, el sociolingüista Halliday propone tres funciones generalizadas del lenguaje: la ideacional (experiencias internas y externas), la interpersonal (la lengua se utiliza para establecer relaciones sociales) y la textual (el mensaje está estructurado como texto coherente). Así Halliday distingue las variedades relacionadas con los usuarios y las relacionadas con la situación comunicativa, la primera hace referencia a lo social y la segunda a lo situacional. Las variedades relacionadas con los usuarios son los dialectos (debido a la región), sociolectos (debido al grupo social) y cronolectos (debido al rengo de edad). Además, se mencionan las variedades relacionadas a la situación: oral/escrito; profesional/ no profesional y formal/informal.

Como hemos visto, la comunicación se establece de diferentes maneras, no solo por medio del lenguaje sino a través de gestos, mirada y el silencio, todos los elementos no verbales que producen comunicación por sí mismos o están presentes en la comunicación verbal. También los elementos comunicativos no verbales, son culturales y sociales, y conducen a demostrar que hay una serie de comportamientos sociales llamados lectos ligados a la comunicación. Así queda demostrado que cada uno de estos modelos, tanto el de Jakobson como el de Orecchioni fueron aportes importantes para el desarrollo de  esta rama y para poder llegar a establecer un “nuevo esquema de la comunicación”.

jueves, 14 de abril de 2022

ANÁLISIS DEL CHISTE DE PEPITO

 

ANÁLISIS DEL CHISTE DE PEPITO


El análisis del discurso trata de transparentar el uso que los hablantes hacen de la lengua valiéndose de la intencionalidad y de mecanismos implícitos para la correcta interpretación de los textos. Para descifrar la macro-estructura o idea principal de un texto no basta con relacionar una palabra con otra, por lo tanto, es más que necesario poseer una serie de conocimientos enciclopédicos que permitan el verdadero significado de lo que se dice; verbigracia, existen palabras como bajo que puede referirse a una persona con poca estatura o a un instrumento musical. De manera similar, se tiene la expresión regla que es entendida como instrumento para trazar líneas pero también, de acuerdo al léxico coloquial  hace alusión al ciclo menstrual. Es justamente de esta realidad interpretativa de la que trata el chiste de uno de los personajes  más cómicos de toda la historia: Pepito, el cual figura siempre como personaje principal en la trama de estos y del cual se realiza un análisis puntual de las estrategias lingüístico-discursivas y las  imágenes del enunciador y del enunciatario que se manifiestan en dicha obra para alcanzar al macro-acto de habla.

En primer lugar, se puede afirmar que el propósito comunicativo del texto en cuestión es el de causar risa o entretener al público lector. Para consumar dicho macro-acto de habla, el autor fue utilizando un sinnúmero de estrategias lingüísticas y discursivas que en este análisis se examinarán por intervenciones del narrador y de los personajes.  En la primera intervención el narrador expone que: “Pepito llora en clase y la maestra le pregunta:” donde el narrador describe el estado en el que se encuentra Pepito a través de la utilización del verbo “llora”, (verbo en presente histórico debido a que el relator tiene la finalidad de actualizar y dar vida a lo que explicita). En ese mismo orden de ideas, como consecuencia de que Pepito estaba llorando la maestra se inquieta y, por ende, lo cuestiona, para ello el autor ha utilizado un conector (y) que pertenece a la clasificación de los de adición; sin embargo, en este caso funge como conector de causa-consecuencia porque el mismo lleva a la docente a interrogarle.

Como se dijo en el párrafo anterior, es el narrador quien cuenta que la maestra interroga a Pepito, sin embargo, al explicitar “-Dime Pepito, ¿A qué viene tanto llanto? Se evidencia un cambio de interlocutor porque en este caso se erige un diálogo entre la docente y Pepito, por lo que se puede aseverar que esta trata de invitar al personaje antes mencionado a que le exprese lo que le sucede, para esto el autor empleó marcas enunciativas: “(-Dime Pepito)” también llamadas extra-oracionales por tratarse de elementos que se encuentran fuera del discurso porque dependen de los interlocutores. Asimismo, la maestra recurrió a la estrategia del cuestionamiento o interrogación de una forma muy particular, pues en vez de preguntarle a Pepito ¿Por qué lloras? lo hace de la manera siguiente: ¿A qué viene tanto llanto? cuestionamiento que presenta dos características: la primera evidencia la causalidad mencionada en el párrafo primero y la segunda se muestra en presente debido a que el prosista está evocando el diálogo de la maestra en ese momento y es preciso decirlo en presente.

Conforme a lo explicitado con anterioridad, en la siguiente intervención es Pepito quien le dice a la profesora: “- Maestra,  es que perdí mi sacapuntas y mi papá me va a pegar:” donde aparece nueva vez una marca enunciativa o extra-oracional (maestra). Asimismo, al enunciar: “… es que perdí mi sacapuntas y mi papá me va a pegar:”, el personaje da la razón del porqué de su llanto por lo que se puede asegurar que la parte subrayada en la cita anterior tiene la misma función que la conjunción causal “porque”, debido a que introduce una oración subordinada que explica la causa de la pregunta ¿A qué viene tanto llanto?

 Por otro lado, Pepito explica “… y mi papá me va a pegar:” donde se describe la acción que tomará el padre de este al enterarse que perdió el sacapuntas “(me va a pegar)”. También  el autor empleó el conector “(y)” que en este caso indica la consecuencia a la que le llevará dicha pérdida, por lo que puede ser intercambiado con conectores como por lo tanto, por ello, por esta razón, etc.

En otro orden de ideas, cuando Pepito dice: “-Maestra,  es que perdí mi sacapuntas y mi papá me va a pegar: ¡Si usted hubiese visto, los golpes que le dio a mi hermana cuando perdió la regla!” obsérvese el fragmento subrayado. En dicho fragmento se muestra la relación que hace Pepito entre el perder el sacapuntas y la pérdida que tuvo su hermana, razón por la cual infiere que a él también le va a pegar. Por otro lado, el autor en la intervención de Pepito recurre al pretérito pluscuamperfecto del modo subjuntivo “(hubiese visto)” con el objetivo de expresar una acción hipotética que no ha sucedido o porque la acción estuvo condicionada en el pasado a que otra ocurriera. De igual modo, continúa explicando-exponiendo lo que le pasó a su hermana cuando perdió regla al enunciar: “¡…los golpes que le dio a mi hermana cuando perdió la regla!!”.

En correspondencia con lo dicho sobre la palabra regla, se hace necesario explicar el significado contextual de dicho vocablo porque en las construcciones de Pepito regla es el “instrumento escolar utilizado para medir y trazar líneas rectas que consiste en una barra rectangular y plana graduada en centímetros y milímetros”. No obstante, regla en este ámbito hace referencia a menstruación que es “es el sangrado que experimentan las mujeres y algunas hembras mamíferas cuando el óvulo, que se expulsa del ovario para ser fecundado, no se fertiliza” por lo que se infiere que la hermana de Pepito estaba embarazada “(…perdió la regla)”. Por lo tanto, esta palabra es de suma importancia para alcanzar el macro-acto de habla que se explicitó desde el inicio de este texto porque es la que lleva al lector a pensar que se refiere al período menstrual por los conocimientos previos o contextuales que posee.

En cuanto a las imágenes del enunciador se puede colegir que el “yo discursivo construido” es el de un humorista experto en la producción de chistes sobre el personaje Pepito “Pepito llora;…perdió el sacapuntas; su hermana perdió la “regla””, además asume que quien va a leer esta obra posee conocimientos enciclopédicos para poder entenderlo. Asimismo, en relación con las imágenes del enunciatario se puede deducir que es la de un público con conocimientos interpretativos.

Como se ha visto, el propósito del texto en cuestión se alcanzó sobre la base de un conjunto de actos de habla organizados causalmente en los cuales se fue explicando y exponiendo a través de la narración, diálogo y descripción el porqué del llanto de Pepito. Asimismo, se han corroborado a través de pistas lingüísticas y discursivas que el enunciatario, es una persona que posee una serie de conocimientos enciclopédicos que le permiten entender lo que se dice.

 












Bibliografía

Diccionario. (.). Definición de la palabra regla o menstruación. www.diccionario.com

CHISTE DE PEPITO, tomado de https://vic.bg/chistes/pepito-llora-llora-y-llora-en-clase-y-la-maestra-preocupada-le-pregunta

 

Pepito llora en clase y la maestra le pregunta:

Dime Pepito, ¿A qué viene tanto llanto?

Maestra,  es que perdí mi sacapuntas y mi papá me va a pegar: ¡Si usted hubiese visto, los golpes que le dio a mi hermana cuando perdió la regla!